sábado, 16 de diciembre de 2017

Depresión ¿La Nutrición Puede Ser La Solución?


Diagnosticar una depresión, pese a quien le pese, no es algo científico, no se necesita un análisis o prueba clínica para salir de la consulta de un psiquiatra con un diagnostico y medicación al caso. Solo necesitas decir que has perdido interés en cosas que antes te producían placer, y que llevas 15 días así, sin ganas de hacer nada. 

Una entrevista con el paciente y lo que este cuenta al psiquiatra es suficiente para diagnosticar desde un proceso de duelo transitorio a una depresión mayor con tendencias suicidas. Es criterio personal y profesional (ya que tienen título oficial) pero no científico.


Y la realidad es que ni se sabe cómo se produce una depresión, ni sabemos cómo curarla con éxito.


El Dr. William J. Walsh ha dedicado 30 años a estudiar la bioquímica del cerebro ya que sospechaba que alteraciones y/o desequilibrios bioquímicos conducían a problemas emocionales y mentales. Como resultado de sus estudios, ha descubierto biomarcadores que pueden medirse fácilmente en análisis de sangre u orina y que se relacionan con distintos tipos de depresión algunas de las cuales se pueden tratar con suplementos nutritivos.

Para Walsh existen 5 tipos de depresión relacionados con distintos biomarcadores, tratables dependiendo de los casos y su gravedad con suplementos nutricionales, o conjuntamente con medicación, para restaurar los niveles de dopamina (la sustancia de la felicidad) y reducir los niveles de norepinefrina (la sustancia de la ansiedad y depresión)


Si el método propuesto por Walsh se generaliza implicaría:

  • Diagnósticos más acertados
  • Mayor porcentaje de éxito en el tratamiento
  • Menos medicación
  • Ahorro en gasto sanitario
  • Profesionales sanitarios más contentos con su trabajo y sus resultados.
  • Psiquiatras y psicólogos necesitarán cambiar la forma en la que se trata actualmente la depresión, entender la química cerebral y los efectos de los desajustes nutricionales (normalmente minerales).

No se trata de que una mala dieta produzca depresión, pero si puede contribuir a desarrollarla, la epigenética y genética también tendrían sus implicaciones.

Un ejemplo son niños con tendencia a ser violentos que consumen dietas altas en azúcar que ha encontrado más del 95% son deficientes en zinc.
Los 5 Biotipos de Depresión según Walsh

– Submetilación, caracterizada por baja actividad en los receptores de serotonina, unida a una rápida absorción cuando se segrega, no se trata por tanto de una deficiencia de serotonina sino incapacidad para retenerla el tiempo suficiente en las terminaciones nerviosas del cerebro. Están en torno al 38% de depresiones y mejoran con inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina o (ISRS). Pertenecen a esta categoría el 98% de trastornos autistas, suele tener un componente genético.

– Deficiencia de Folato, causa propensión al pánico, problemas de sueño, baja líbido..etc. En torno al 20% de casos, responden a suplementación de ácido fólico y vitamina B12

– Sobrecarga de cobre: caracterizada por un exceso de cobre en sangre que causa deficiencia de dopamina y exceso de norepinefrina. Es muy común durante el postparto, aumentar el cobre es necesario para el desarrollo de capilares y red sanguínea del feto, y algunas madres no son capaces de eliminar el exceso de cobre después del parto.


Sienten mucha ansiedad, ataques de pánico, intolerancia a los estrógenos, acúfenos, sensibilidad e hiperreactividad dérmica. Apenas son efectivos los ISRS pero el 17% de personas que la sufren responden a dietoterapia.

– Trastorno de pirrol, ocurre cuando el mecanismo de producción de serotonina está dañado y existen altos niveles de estrés oxidativo. La producción de pirrol (hydroxyhemopyrrolin) se incrementa con el estrés que baja los niveles de zinc y vitamina B6, necesarios para la producción de neurotransmisores como serotonina, melatonina (hormona del sueño) GABA (hormona del relax) y acetilcolina (necesaria para la memoria).

Sufren fuertes cambios de humor, miedo y ansiedad extremos, poca memoria, a veces dificultades para leer, sensibilidad a luz y sonido. Solo el 15% mejora con ISRS, siendo necesario aumentar zinc y B6 junto con antioxidantes.


– Por metales tóxicos, el más común es el plomo pero solo sucede en un 5% de casos. Suplementar con zinc, glutatión y antioxidantes. Si el causante es plomo se aumenta el calcio. Presentan dolor abdominal, cambios de humor con irritabilidad y ataques de ira, mal aliento, intolerancias a alimentos y sabor metálico en la boca.

Si en el futuro los estudios de Walsh, ha publicado más de 200, y su método tienen cabida en el sistema sanitario, los niños, sus madres y población en general podríamos evitar medicaciones innecesarias con un solo análisis de sangre y sobre todo evitar que muchas personas desperdicien sus días.


Fuente:  http://www.logicaecologica.es/2017/10/05/depresion-la-nutricion-puede-ser-la-solucion/